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NUA, nace del deseo de ayudar a personas reales y resolver problemas reales. La situación actual nos ha llevado a reflexionar sobre la forma de vivir de las personas. Ahora, más que nunca, las personas se preguntan dónde viven y hacen de esto una prioridad. ¿Me gusta esta casa? ¿Me gusta el entorno? ¿Tengo suficiente intimidad? ¿Suficiente luz y espacio exterior? ¿Satisface mis necesidades? 

El proceso de cambiar de vivienda o obtener una, muchas veces, es un mar de dudas, y no contamos con una asesoría de profesionales de confianza, que nos guíen en el proceso de forma objetiva. 

Por eso, a través de nuestra experiencia y estudios, te ayudamos a encontrar y crear tu hogar en un entorno natural, descubriendo oportunidades únicas.

 

Solicita una sesión con nosotras sin compromiso, para explicarte cómo podemos ayudarte.

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¡Hola! Soy Nerea Sánchez.

Decidí ser arquitecta porque me apasiona la creatividad. Encontré en la arquitectura una profesión que me aportaba ese espacio de creación a través de la solución de problemas que afectan a nuestro entorno, y me lancé sin dudarlo.

 

Vivo en una pequeña ciudad costera, en la que he podido disfrutar y apreciar el mar y también la montaña. 

 

Siempre he sentido que la naturaleza me traía paz, pero más después de estos años de pandemia y de un contacto más estrecho con esta, he sido consciente de los efectos que tiene vivir o no en una vivienda que te ofrezca calidad de vida. 

 

Desde 2013, he dedicado 9 años a mi formación y ejercicio como arquitecta. He colaborado con diferentes empresas como inmobiliarias y empresas constructoras, y durante los últimos 3 años como independiente junto con Uxue. Estos años me han servido para aprender del sistema que nos rodea y tomar perspectiva, y también, como base para proponer nuevas soluciones a través de la arquitectura.

 

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¡Hola! Soy Uxue Mutuberria.

Un día, muy pequeña, al llegar a casa, encontré unos planos de la rehabilitación de la casa familiar materna. Me causaron tanto interés, que desde entonces tuve claro que quería ser arquitecta. ¡Nunca dudé!

 

He vivido en un pueblo donde he estado rodeada de naturaleza, animales y mucha paz y libertad.  Libertad para jugar en cualquier rincón, libertad para relacionarnos con cualquier persona, LIBERTAD de experimentar con cualquier animal que se encuentra en la naturaleza. Con el tiempo he apreciado la buena calidad de vida que he podido tener desde muy pequeñita.

Desde 2013, entre el pueblo y la ciudad, he dedicado 9 años a mi formación y ejercicio como arquitecta. Tras mi formación, pensaba que el pueblo no me podría dar la satisfacción profesional que yo deseaba. Sin embargo, la precariedad del mercado laboral y la añoranza de la calidad de vida acostumbrada, hizo que me planteara muchos aspectos relacionados con mi vocación y mis necesidades.


Decidí aprender de ello, aplicando mis conocimientos en la búsqueda de viviendas que mejoren la calidad de vida de otras personas.

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