¿Te has planteado alguna vez vivir o desconectar en un entorno natural? Esta es una idea que ronda en nuestras cabezas, pero nunca damos el paso hacia el cambio.
Estar en contacto con la naturaleza tiene muchos beneficios para la salud, ya que ayuda a mejorar tu calidad de vida y la de los tuyos.
Un entorno natural nos proporciona bienestar físico y mental, nos ayuda a recargar energía y relajarnos. Por lo tanto, cada vez que necesitamos ordenar nuestros pensamientos y recuperar la serenidad es el mejor remedio.
Si bien muchas personas disfrutan de vivir en una ciudad, otras personas necesitan el más mínimo contacto con la naturaleza, ya que impacta de manera positiva en el bienestar de ellos, facilitando una sensación de relajación y armonía.
Un paseo por la ciudad o descansar en casa no consigue los mismos resultados que salir a caminar por el monte o senderos, disfrutar de una siesta en el prado, ir a la playa a tomar el sol, sentir la bruma en la cara, etc.… Cuanto más natural y aislado sea el entorno, mejores son los beneficios.
Como se ha dicho antes, vivir en un entorno natural, lejos del ruido y del consumismo… tiene muchas ventajas que tal vez nunca te habías planteado y merecen la pena:
Respirarás aire puro todos los días: vivir en un entorno natural con poco tráfico y alejado de vías concurridas, ayuda a respirar aire más limpio y puro.
Disfrutarás de un entorno privilegiado: una vivienda próxima a la naturaleza te acerca a ella cuando desees, para pasear, hacer ejercicio, salir de picnic… y además podrás disfrutar de espectaculares puestas de sol, días de lluvia o cielos estrellados que no se aprecian en grandes núcleos urbanos.
Tranquilidad y un ambiente zen: las zonas naturales normalmente están poco pobladas, no se producen grandes aglomeraciones de gente ni atascos y esto, ayuda que el ambiente sea relajante.
Los pequeños tienen mayor libertad de movimiento: los espacios verdes y abiertos, y la falta de tráfico, favorecen la libertad de movimiento de los pequeños de la casa que podrán estar al aire libre. Aparte de eso, siendo una zona poco habitada, todos los vecinos os conocéis y no tendrás que preocuparte por que se crucen con personas extrañas.
Una vida mejor para tus mascotas: en muchas familias hay un animal de compañía, el cual también necesita moverse y correr. En un entorno natural, su calidad de vida será mejor y podrás jugar con ellos con mayor libertad.
Y tú, ¿deseas vivir en un entorno natural?
Espero que esta reflexión te sirva para pasar a la acción, estaremos encantadas de recibir tus dudas.
Comments